Pain.
Es curioso cómo el verano que empezó con tanta ilusión ahora está acabando con tanto dolor, tristeza, sensación de pérdida. ¿Por qué las cosas se han tornado así, si teníamos todos los ingredientes para disfrutarlo al máximo? Supongo que la respuesta es sencilla: los humanos nos dañamos a nosotros y a los que están a nuestro alrededor más que cualquier otro ser vivo. No nos planteamos las consecuencias de nuestros actos o palabras, simplemente actuamos y, después, reflexionamos.